lunes, 7 de marzo de 2011

Air (Alton Towers)

En la inmensidad de los oscuros bosques ingleses podemos encontrar varias especies perdidas de suma importancia. Nos podemos cruzar con una bestia extraterrestre de blanca piel que escupe sangre llamada Nemesis. Podemos compartir ruta con la criatura más veloz de la faz de la tierra la cual nos retará a sentir la velocidad en nuestros rostros, se llamará Rita. E incluso puede que tengamos que afrontar una larga caída al vacío desde las alturas en la prominente Oblivion.

Pero en medio de tantas aventuras y emociones, cuando nuestros corazones latan al doble de su velocidad normal, encontraremos un pequeño oasis, un remanso de paz, un rincón en el que nuestra consciencia deambulará entre el aire y la tierra y podremos abrir nuestros brazos como si de alas se tratasen.

¿Listos para dar un paseo volando por los aires? Air nos lo ofrecerá...

Se trata de Air, en Alton Towers, el paraíso de las coasters más vanguardistas no sólo del país sino también del continente. El único parque europeo que contiene 3 B&M's ofreció al mundo, con la construcción de este proyecto, un punto de vista diferente al presentado hasta entonces, posicionándose de nuevo en el mundo de los parques y consiguiendo enamorar a todos los entusiastas que probasen la bestia azul.

Hoy, en Bloggercoaster, vamos a iniciar este suave y relajado recorrido por una de las mejores piezas que encontramos en el continente, dura contrincante de cualquier modelo nuevo que se precie y ejemplo de cómo gestionar, de principio a fin, el éxito de un proyecto.


A medio camino entre cielo y tierra

Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de pensar en Air es que, en su día, fue un prototipo del que posteriormente ha sido conocido como modelo flying-coaster. Ello conlleva siempre, tanto a nivel técnico como a nivel de marketing una serie de retos que Alton Towers, con sus conocidas Secret Weapons, ha demostrado saber solventar holgadamente en cada ocasión que se les ha presentado (Air fue, en su día, la Secret Weapon 5)


El layout coquetea en numerosas ocasiones con las colas y los viales de salida.

Como prototipo, Air demostró modificaciones y novedades en 4 aspectos básicos en un proyecto de coaster que vamos a analizar uno por uno: trenes, layout, estación y estructura.

Los trenes, como en la mayoría de proyectos novedosos de B&M, fueron una de las grandes incógnitas prácticamente hasta unos meses antes de la inauguración oficial, por lo que hasta que no surgieron las primeras pistas y testings el aficionado no pudo observar bien dónde iba a posicionarse en el viaje o en qué postura lo haría. Estamos hablando de trenes de agarre superior (herencia directa de las invertidas) aunque con una principal modificación: al estar sentados (esto es perpendiculares al nivel horizontal de la estación) el tren tiene un sistema hidráulico que "gira" cada fila de asientos hasta una posición a 90º, situándonos frente al suelo en una posición paralela al suelo, lo que da a nuestro cuerpo la sensación de estar tumbado y volar, de ahí toda la parafernalia logística del proyecto.


En su inauguración Air causó mucho revuelo, pese a presentar una vegetación inexistente.
FOTO: Tower Times

Antes de salir de estación la posición de las filas del tren se bloquean hasta llegar a los brakes finales, por lo que durante todo el layout el tren permanece con las filas plegadas, lo que permite que los elementos de choque próximos al viajero estén algo más cercanos de lo normal.

El layout de Air presentó, como es lógico, multitud de limitaciones, pruebas y elementos preventivos que hacen que hoy en día, cuando prácticamente tenemos una flota de unas 10 flying-coasters repartidas por todo el mundo, su recorrido signifique simplicidad y sencillez, pero en su día el layout de Air fue considerado toda una obra de arte.


Durante todo el recorrido nos mantenemos especialmente cerca del suelo.
FOTO: Tower Times

Para empezar la coaster tuvo que lidiar con el eterno reto de Alton Towers: no superar jamás, por ley, la altura máxima de los árboles, haciendo que la coaster quede integrada en el interior del bosque e imposibilitando la contaminación visual y sonora del entorno (un parque natural, no olvidemos). Por lo que el layout de Air no supera en ningún momento los 20 metros de altura tope en base al nivel 0 (la estación). Tras un lift menos inclinado de lo normal, escalamos una pequeña colina que nos adentra en el verde bosque del entorno.


Al paso más cercano de la coaster por estación nos sobrevuela a un par de metros de nosotros.

Tras el pequeño drop y acelerando considerablemente nos situamos ante el primer elemento experimental, de doble contenido: lie to fly + fly to lie. Este elemento primero nos gira 180 grados la posición (es decir, pasamos de estar tumbados a estar cara al cielo) y posteriormente vuelve a su posición original, tumbados. La sensación que se experimenta es de una presión considerable, teniendo en cuenta que la unión del peso de nuestro cuerpo, el cambio de orientación y el incremento de fuerzas G positivas (ya que afrontamos una curva peraltada hacia la izquierda) hace que nos sentamos pesados, clavados pero flotando a la vez. Algo MUY extraño tras las primeras veces, os lo puedo asegurar.

Tras este regalo técnico el recorrido deja poco lugar a la sorpresa, pasamos tras un pequeño túnel, un par de curvas y nos adentramos en un larguísimo y enorme in-line twist que nos permite ver, de nuevo, el cielo durante unos segundos. Nos esperan unos 150-200 metros de recorrido de transición, curvado siempre y prácticamente raso sobre el suelo cubierto de césped y rocas, lo cual nos lleva por último a la recta de brakes y posteriormente nos coloca en una de las dos estaciones que posee la coaster.


Es este concepto otra de las novedades que se presentó: la doble estación. Estandarte del resto de proyectos de flying-coaster, en principio se ideó como un sistema de carga rápido y efectivo que permitiera alternar dos estaciones simultáneamente.


Tras el Lie to fly afrontamos la peraltada durísima a ras de suelo, las G's positivas están servidas.

El motivo principal de este concepto probablemente fue que la carga de una flying suele ser costosa si hablamos de tiempo, pues son hasta 3 los arneses que debemos ajustarnos y la cantidad de sensores que tiene cada asiento evita una carga más rápida. Tardamos aproximadamente unos 20 segundos a colocarnos arneses de piernas, cintura-pecho y hombros.


Antes de llegar al final del recorrido nos encontramos el enorme in-line twist.

El funcionamiento de este concepto es tan complejo como su explicación: hay dos railes de estación totalmente iguales con acceso para cada uno de ellos y la salida situada en un andén central, que contiene a su vez también los armarios para objetos de los viajeros. A cada extremo de la estación hay una pieza móvil de raíl de vía que, de forma similar al cambio de agujas en los trenes, hace que el tren que salga se encarrile en la vía principal o que el tren que llega de la recta de brakes entre en su correspondiente estación.

Todo ello hace que la carga de una flying-coaster sea demasiado lenta y, pese a contener doble estación, se podría decir que el nivel de attendance no supera en ningún caso el que podría tener cualquier otro modelo de B&M ya que el corto layout de este proyecto hace que sea imposible situar más trenes en el recorrido, por lo tanto la estación de doble carga fue, en Air más que en cualquier otra flying, un logro técnico trasladado de las mesas de diseño a la realidad, pero nunca actúa como pieza elemental o clave del proyecto.


La coaster nos da la bienvenida a las colas pasando por encima de nuestras cabezas.

Finalmente cabe mencionar la estructura de raíles y soportes que, pese a no modificar mucho el concepto familiarizado del entusiasta hacia B&M (esto es raíles cuadriculados con formas geométricas perfectas que sustentan vías tubulares y soportes tubulares robustos apoyados en footers cuadrados de cemento armado) sí que modificó el concepto de repartir pesos ya que el tren de una flying, debido a su mecanismo y envergadura, es ligeramente más largo y pesado que el de, por ejemplo, una invertida como su vecina Nemesis.


Pese al complejo recorrido de la coaster, la altura que alcanza jamás supera la decena de metros

Encontramos soportes mucho más complejos y diseñados específicamente para repartir peso de manera más efectiva ocupando el menor campo visual (inversiones limpias, sin ningún soporte convertido a elemento de choque). En este sentido Air se diseñó específicamente para que el viajero evitase ver la mayor cantidad de soportes posible, limitándose a ver únicamente tierra y cielo.

Algunos datos de interés...
  • Nombre: Air
  • Fabricante: Bolliger & Mabillard (B&M)
  • Diseño: John Wardley
  • Parque: Alton Towers (Inglaterra)
  • Modelo: Flying-coaster custom (prototipo)
  • Longitud: 800 metros.
  • Altura máxima: 20 metros.
  • Velocidad máxima: 75 km/h.
  • Máximas G's: 3,5G
  • Presupuesto: 15 millones de € (aprox.)
  • Año de construcción: 2001-2002.
  • Attendance: 1500 p.p.h.
  • Inauguración oficial: 16 de marzo de 2002.
Flotar en un mar de aire

Se nota, desde buen principio, que Air está diseñada y concebida como una experiencia completa, antes que como un cúmulo de elementos unidos con más o menos lógica (patrón que suele seguir la competencia de los suizos B&M).

Así pues, quien pretenda riddear Air con la intención de experimentar velocidades de infarto, alturas de vértigo o inversiones en gran número, puede empezar a olvidarse de ello, pues Air ofrece, en cuanto a emociones, lo más parecido a la que podría ser una coaster familiar de B&M.


El proyecto discurre en varios niveles y alturas, siguiendo el terreno establecido por el parque.

Esta coaster está diseñada y construida para transportarnos mentalmente a la sensación de volar o de planear sobre el campo tal y como la puede experimentar, por ejemplo, un pajarillo inglés. En todo momento no dejamos de estar a más de 5 o 6 metros por encima del suelo por lo que la velocidad del tren se ajusta totalmente al ritmo que podríamos seguir si tuviéramos que esquivar árboles, rocas o pequeños montículos, como pasa en este proyecto, teniendo únicamente una pequeña sensación de velocidad al adentrarnos en su túnel, en medio del layout, tan espectacular como, quizás, innecesario.

Encontramos con esta joya un momento de paz, de serenidad, de relax que difícilmente encontraremos en el resto del parque, donde priman sensaciones más extremas. Aquí de lo que se trata es de estar comodísimo (el sistema de sujeción de la coaster es tan cómodo que da la sensación de que te podrías dormir con el arnés puesto y no te enterarías), de observar de cerca la tierra (llegamos a pasar los brazos a un escaso metro del verde césped) y de visionar como nunca el cielo (en varias ocasiones dejamos de ver nada que no sea el azul o el blanco de las nubes).


A la salida encontramos una enorme tienda parecida a una nave futurista.

Es Air, en definitiva, una experiencia, un viaje sensorial que unido a la música chill-out que alimenta colas, estación y tienda nos da una idea, por unos minutos, de estar prácticamente en el paraíso.

Amigos y amigas, sin duda es una coaster de libro, rozando la perfección en absolutamente todo y llegando a copar claramente el top 10 de todo entusiasta europeo de las coasters. Si tenéis algún día la oportunidad de viajar a Inglaterra y el honor de poder pisar Alton Towers, no os perdáis Air, porque probablemente la experiencia os deje tal recuerdo que querréis volver a montarla una y otra vez sin parar.

*****

Y hasta aquí el completo análisis a una de nuestra joyas continentales, un golpe maestro de uno de los parques que mejor sabe jugar sus cartas año tras año: Alton Towers.

Sólo me falta recordaros que si tenéis más ganas de leer análisis completos de coasters, con fotografías, videos y descripciones fiables, aquí os dejo el listado de las que se han analizado hasta el momento en Bloggercoaster:
¡Espero que disfrutéis con la lectura y visionado de todas las entradas!

5 comentarios:

  1. Otro golpe de mesa que impuso AT jugando sus cartas.

    ResponderEliminar
  2. Estoy de acuerdo contigo, Air me encantó a todos los niveles. Lo que más me preocupaba al principio era la comodidad de los arneses, pero son excelentes. La probé en última fila y por culpa de las colas no pude repetir en primera. La sensación debe ser sustancialmente diferente...

    ResponderEliminar
  3. Sigue siendo mi #2, detrás de The Ultimate. Esta montaña es, sin duda, un logro de la ingeniería. Si bien el recorrido no es muy espectacular, largo, alto o enrevesado, ofrece sensaciones muy placenteras y únicas.

    Un hecho que hace única cualquier flying es que la experiencia no empieza cuando sales del lift o, para algunos, cuando sales de la estación, sino que en el momento del "assume the position" la gente ya sabe que algo no va a ser igual, y esa sensación de anticipación es tangible en el ambiente de Air. Ambiente, como bien dices, chillout, que contrasta con los nervios de los que experimentan la sensación por primera vez(o primeras veces).

    Por cierto, según la rumorología británica de montañas rusas, Air tenía que estar tematizada como una arma secreta militar para neutralizar Nemesis, pero con los ataques del 11-S se decidió suavizar el themeing y convertirlo en lo que es hoy: un soplo de aire fresco en una área que rezuma adrenalina por los cuatro costados.

    ResponderEliminar
  4. Supongo que lo sabes que muchas de las fotos no son visibles, right?

    Jaumet

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo se lo se... es problema de Imageshack y su cambio de política con los usuarios. Voy restaurando poco a poco entradas, pero es un trabajo casi faraónico. Gracias por el aviso anyway ;)

      Eliminar