lunes, 2 de junio de 2014

China Dinosaurs Park (parte 3)

Tercera y última parte del análisis de un grande y desconocido parque temático como es el de China Dinosaur Park, enigmático y repleto de theming allá por donde nos fijemos y con cantidad de trucos escondidos, así como rides que conocemos de multitud de parques pero camufladas con una tematización que las convierte en únicas.

Recordad que en la primera parte de este particular análisis os hablé del área Magic Rain Forest, donde se sitúan hermosos y cuidados jardines además de encontrar la presencia de la majestuosa Dinoconda. En la segunda parte del mismo análisis os hablé en profundidad de Koocasuka, un área temática inspirada en una especie de fortín de rocas y ambientada en batallas de humanos a bordo de gigantescos dinosaurios.

Así pues hoy, en Bloggercoaster, es turno de fijarnos en las áreas de Lubura y China Dinosaur Museum, o lo que es lo mismo, el resto del parque que nos queda por ver (y que la verdad sea dicha, recorrimos en muy poco tiempo dado que apenas teníamos tiempo para detenernos). Al final del análisis también os comentaré el resto de la jornada, en un apacible y espectacular viaje a más de 350 km/h en dirección a Beijing.


Los restos de Koocasuka

Parecía en la última entrada que nos podíamos olvidar ya de la ciudad fortificada de Koocasuka, de sus batallas entre dinosaurios ataviados con brillantes armaduras y humanos protegidos por largas lanzas, pero no, todavía nos quedan dos conceptos brillantes por observar en este espectacular rincón del parque:


El primero de ellos es el último credit que nos quedaba por ver en el parque, Dinosaur Mountain:


Como no podía ser de otra manera, tras el gigantesco pabellón que acoge Dinosaur Mountain nos encontramos con un credit bastante sencillo como es una moto-coaster de Zamperla, pero que dadas las características extra que ofrece se postula ante esa categoría tan apreciada por el entusiasta de coasters como lo es el ser única en el mundo.

 ¿Porqué? Sencillo: a diferencia del resto de moto-coasters que ofrecen una recta de lanzamiento LSM, en el caso de Dinosaur Mountain salimos de la estación y nos adentramos en un lift impulsado por ruedas y motores, es decir, un lift tradicional de coaster familiar. Luego el interior es una especie de fantasía paranormal repleta de estrellas y planetas colgantes, uno de esos credits que te dejan pasmado al salir de semejante odisea.


Como os he dicho, el credit es de Zamperla, por lo que sí, en el famoso vídeo en el que muestra todas las rides y coasters que fabricó para este parque asiático, también hay un pequeño espacio para esta moto-coaster única, podéis echar un vistazo a la parte del vídeo en la que, cortesía de la empresa, aparece la coaster con las luces encendidas (ya que por supuesto, se trata de un credit indoor).

La otra "ride" característica es una de esas que me tienen el corazón totalmente robado y la podemos localizar muy cerquita del King Kong de Huss del que os hablé en la anterior entrada (y sí, reconozco que en esa entrada me olvidé de nombrarla). Su nombre es Fantastic Spooky House y se trata nada más y nada menos de un paseo walkthrough a través de un laberinto de pasillos y cavernas que nos conducen por distintos pasajes repletos de sonidos y animatronics de, cómo no, habitantes del jurásico:


A lo largo de los pasillos (genialmente tematizados) nos encontraremos distintos puntos interesantes como puentes colgantes, cascadas o cavernas, aunque en muchos puntos la ride se torna en no apta para claustrofóbic@s o nictofóbic@s (con fobia a la oscuridad total) pues adquirimos un negro total y hay que caminar palpando las paredes o el suelo:


Por suerte, no hay sustos del tipo actores reales o animatronics inesperados, así que familias con niños pequeños, sois bienvenidas:


Esta es la muestra definitiva de que Koocasuka es un área repleta de theming espectacular (eso ya nos había quedado claro) pero también con una capacidad tremenda de ofrecer rides en días de meteorología más adversa, con predominancia del espacio indoor o cubierto.

Saltos en el tiempo...

Ahora ya sí dejamos atrás la magnífica Koocasuka y entramos en Lubura, un área que sin abandonar el theming de dinosaurios nos mete en una anacronía temporal e histórica de esas clásicas que aparecen al hablar de saurios o de tiempos remotos. Ya la habíamos visto un poco en Koocasuka, con las batallas de humanos a lomos de dinosaurios, pero en este caso se acentúa mucho ya que este área vendría a ser algo así como un vistazo a la prehistoria o a los orígenes de los tiempos de la humanidad... pero con reptiles gigantes:


En este área, poblada principalmente de grandes flats, veremos esos saltos en el tiempo y esos juegos con la ilógica mezcla entre humanos y dinosaurios a través del theming, por ejemplo con esta simpática estatua de dos niños cavernícolas jugando con un hueso de dinosaurio y con un estegosaurio en la cascada trasera. Es totalmente anacrónico pero a la vez resulta bello, así que en China esto puede colar perfectamente:


La primera ride con la que nos cruzamos el RCT en este recorrido fue esta que veréis en fotografía. Bien, se trata cómo no de la enésima ride indoor, por lo que ver no la vais a ver exactamente, habrá que intuirla. Es factura de la italiana Zamperla Moser Rides  y su nombre es Megalith Adventure:


Para que os hagáis una idea de lo que es, de nuevo voy a recurrir al famoso video de Zamperla donde aparece más o menos lo que es, aunque a los lectores y lectoras más asiduos de Bloggercoaster os sonará porque en el análisis de Wiener Prater os hablé del mismo modelo de flat ride, llamado allí Extasy y que se trata de una spin-ride que, en un determinado momento, coloca las góndolas del revés por completo para desorientarnos totalmente.

¿Porqué riddeamos esta tal Megalith Adventure? En un principio pensamos que se trataría de una dark ride al uso (ya que no vimos ninguna en todo el parque) y entramos pensando que lo era. Una vez accedimos al interior nos dimos cuenta de que no había marcha atrás, así que tuvimos que sufrir el leve mareo de una flat de este calibre.

Pasado ya el efecto giratorio y mareante de Megalith Adventure se nos presentó ante nuestras narices una de las rides más icónicas del parque, un majestuoso giant freesbee facturado cómo no por la omnipresente Zamperla y que aquí recibe el nombre de Crazy Firedrake Drill:


Por causas meteorológicas, fuera de servicio ese mismo día (aunque he de reconocer que me hubiera encantado poder probar semejante bicho), fijáos en la altura que alcanzan los soportes que aguantan el motor y, si todavía tenéis duda, podéis consultar el video-catálogo de Zamperla donde aparece esta gigante estructura en funcionamiento.

Bien, si no podíamos riddear Crazy Firedrake Drill nos propusimos desplazarnos apenas un centenar de metros hasta encontrarnos con Coaster Brontosaurus, que en realidad es una disk'o coaster de los mismos italianos y que (¡oh, no!) también se encontraba fuera de servicio ese mismo día. Hay que decir que en este punto del parque era tanta la prisa que llevábamos y el desánimo por por encontrarnos cosas cerradas, que una más nos dio absolutamente igual ya. Nosotros íbamos con la mente en Dinoconda (que en este punto os he de recordar que todavía permanecía cerrada, nos la encontramos abierta tras completar toda esta parte del parque).


Sea como sea, Coaster Brontosaurus presentaba un theming impresionante, muy distintivo respecto a otros proyectos similares de esta empresa y con una interactuación totalmente contradictoria entre seres humanos en forma de marineros y brontosaurios en forma de animales de carga (¿?):


Si estáis interesados en poder ver en funcionamiento el plato giratorio de esta espectacular disk'o coaster, podéis echar un vistazo al video-catálogo de Zamperla donde aparece en pleno rendimiento.

¡Al agua dinosaurios!

Si algo caracteriza el área temática de Lubura respecto al resto de áreas del parque es que vendría a ser una especie de área acuática donde se permite al visitante deambular en bañador, algo así como un parque acuático dentro del propio parque temático (similar a lo que encontramos en Hersheypark, EEUU). Existen una especie de vestidores desde los cuales podemos acceder o salir al área y así cambiar y dejar en consignas nuestras bolsas o ropa seca.

Pese a que el área entera de Lubura presenta un nivel de theming ligeramente inferior en cuanto a cantidad de cemento usado respecto a la espectacular Koocasuka, aquí también encontramos edificios exageradamente enormes como es la misma entrada al área, ambientada en un gigantesco barco de vela encallado en plena calle:


Probablemente no os hayáis fijado en el detalle de arriba a la derecha, pero si es así ya os lo enseño yo. Para no desentonar con el theming general del parque, incluso aquí podemos encontrar dinosaurios (aunque sea intentando invadir una torre de vigilancia):


Como buen parque acuático dentro de un parque temático, las rides o toboganes que localizamos están perfectamente integradas con el entorno, a pesar de mostrar también los singulares coloridos de este tipo de atracciones. Es el caso por ejemplo de la vistosa Extreme Abyss, acabada en un embudo gigantesco y por la cual discurrimos con grandes flotadores:


O la no menos interesante Super Boomerango, situada a escasos metros de la anterior y en la que también nos desplazamos a través de flotadores alargados:


En mitad de las dos estructuras localizamos una curiosa manera de mimetizar con el entorno el lift de subida de los flotadores y barcas, metido en una especie de roca puntiaguda que a la vez también oculta y protege de la intemperie las escaleras de acceso a la torre superior desde donde podemos acceder a ambas rides acuáticas:


Pero el arma principal de este área temática no radica ni en el giant frisbee, ni en la disk'o coaster, ni siquiera en estas dos sinuosas rides. Para nada. El arma principal se llama Mega Tsunami, es el big splash del parque y tiene una característica que le otorga mucha personalidad:


Efectivamente, se trata de un big splash cuya gracia es únicamente el sistema de lift (realizado a través de un ascensor único) y el espectacular drop, de una treintena de metros de altura en una barcaza típica de big splash y que desconozco si se trataba de obra de Intamin (clásica facturadora de este tipo de rides) o bien de una empresa china especializada en la copia de este tipo de atracciones:


El caso es que nuestro tren en dirección a Beijing salía en más o menos una hora, por lo que no estábamos dispuestos a llegar a él completamente calados de agua, así que decidimos contemplarla desde la barrera como meros espectadores:


Pese a que durante todo el día tuvo ciclos, creo que esta es posiblemente la ride menos tematizada y más olvidada por parte del parque a la hora de ofrecer el "toque único" en el theming, supongo que si nos fijamos en Mega Tsunami estaríamos en el punto crítico en el que la financiación viene a desvanecerse poco a poco. Toda una lástima.

Edificios monumentales

Pasamos inmediatamente de la húmeda Lubura a la fría y tosca China Dinosaur Museum, un área dedicada por completo a dos enormes edificios. Por una parte tenemos el 5D Interactive Theater, que es el teatro que se sitúa justo debajo de los tres picudos cuellos de brachiosaurus que vimos desde la primera entrada de análisis:


En dicho teatro se representa una película envolvente en 5D en la que predominan los efectos de luz, vaporizadores y sobretodo música y sonido, además de bonitas proyecciones en 3D.

En la bandeja superior del edificio, sustentada por los tres pilares de cemento puro, nace una especie de trompa azulada sostenida por soportes blancos y que es una especie de tobogán por el que podemos deslizarnos para llegar a la parte baja o, si lo deseamos, bajar por unas escaleras situadas justo debajo de esta pasarela azulada:


Justo al lado de este cine 5D y mirador localizamos una gran cúpula en la que se encuentra Crossing Jurassic, el flume del parque que, por desgracia, encontramos cerrado también ese día y que, creédme si os digo que es quizás una de esas rides que más nos habría marcado. Podéis echar un vistazo a su recorrido a través de este interesante vídeo:


La verdad es que como podéis ver son 8 minutazos de flume que, pese a presentar momentos realmente lentos y aburridos, habría merecido la pena riddear solo por ver el tratamiento del espacio indoor que se ofrece durante la práctica totalidad del ciclo.

Últimos tramos ya de nuestra rápida ruta por el parque de los dinosaurios, encarando un cierre de círculo y volviendo, bordeando las escarpadas montañas de Koocasuka por la parte exterior. Como podéis observar la tematización es total, tanto en el interior como en el exterior de la zona, lo que le otorga mucha más calidad todavía al acabado final:


En este punto fue donde empezamos a ver que Dinoconda estaba cargando trenes (vacíos) y fue cuando nos animamos a correr a la búsqueda de un mísero ciclo que nos pudiera permitir tachar con una cruz el mítico credit:


El resto de la historia ya lo conocéis, Dinoconda nos hizo esperar casi una hora entera para poderla riddear, aunque finalmente la conquistamos (e hice buena cuenta de ello en la anterior entrada de análisis):


Nuestra visita al parque acabó en una hora alrededor de las 14:00 y las 14:30 (es un dato que va deambulando por mi memoria pero que no recuerdo con demasiada precisión). En este punto nuestra misión era muy clara y todos los pasos los teníamos ya estudiados.

Primero había que pasar de nuevo por el edificio de información al cliente, a la entrada del parque, para recoger las maletas que habíamos dejado al entrar, paso que dimos rápidamente gracias a la amabilísima atención de las chicas encargadas en este puesto. Inglés aceptable y una sonrisa impecable en todo momento, loable.

Después llegó el paso crítico: encontrar un taxi en la entrada del parque en el que pudiéramos desplazarnos, maletas incluidas, hasta la estación de tren de alta velocidad de Changzhou, a escasos kilómetros del parque. Esto costó un poco más y aquí fue donde nos encontramos con la otra gran anécdota del día: un taxista se ofrecio a llevarnos en un coche en el que claramente NO cabían las 3 maletas, nosotros tres y él mismo. ¿Solución? Metió dos maletas en el maletero, no cerró la puerta del mismo, la tercera maleta en la parte trasera del coche (junto a Luis y un servidor) y de copiloto Jaume.

Cada vez que veíamos un bache o irregularidad en el asfalto sufríamos por ver nuestras maletas rodando carretera atrás. Por suerte llegaron sanas y salvas a la estación... y nosotros tres también.

De Changzhou a Beijing... ¡como balas!

Llegamos con apenas un cuarto de hora de margen pero llegamos. Estábamos emocionados no solamente por haber podido completar (con sus más y sus menos) el magnífico parque temático de China Dinosaur Park, sino por poder experimentar en apenas unos minutos la auténtica velocidad de los conocidos trenes bala asiáticos.

Para ello nos plantamos ante la estación de Changzhou de esta particular linea Shanghai-Beijing, que recorre durante más de 1000 kilómetros la geografía china desde el centro hasta el norte del país:


La gigantesca estructura de la estación era algo parecido a como ocurre en España: espacios enormes, un hall en el cual si gritabas rebotaba el sonido en forma de eco y en general la sensación de que no es para tanto. Cabe señalar que nosotros habíamos adquirido previamente desde aquí los tickets del tren, con varios meses de antelación, por lo que pudimos validar enseguida nuestro viaje, para agilizar más los trámites.

Un ligero detalle es que, una vez pasado el control de rayos X y un par de arcos de seguridad, una vez situados en el andén superior, podías situarte en pequeñas colas que se formaban en los puntos donde te indicaban que las puertas se iban a situar. Los carteles electrónicos que aquí veis colgados no solamente indicaban el origen y destino, las estaciones intermedias, el andén y la hora en forma de reloj analógico, sino que también te situaban los asientos que comprendía cada pequeña cola de espera como la que veis al fondo de esta fotografía:


Tras unos cinco minutos de espera y con una puntualidad británica, llegó nuestro tren bala que nos llevaría hacia la capital de China (Beijing, más conocida aquí como Pekín). El dato anecdótico es que el tren de alta velocidad chino es exactamente el mismo que el AVE español, con la única diferencia de que el chino alcanza velocidades realmente altas en prácticamente todo el recorrido, sin frenar apenas más que en las 7 u 8 estaciones intermedias del recorrido:


Una vez dentro del tren encontramos nuestros asientos y nos dispusimos a acomodarnos para afrontar unas 5 horas de viaje en dirección a la estación central de Beijing.


Previamente adquirimos bebida y comida en la estación de Changzhou, con el conocimiento de que el viaje posiblemente se acabaría haciendo pesado, más teniendo en cuenta que al principio habría novedad, pero que luego todo se convertiría en rutina. Pese a todo, el paisaje era espectacular en muchas ocasiones (incluso con la neblina típica china que apenas dejaba ver un par de centenares de metros más allá de las vías). Incluso pudimos divisar en varias ocasiones tramos de la Gran Muralla China enroscándose a través de montañas y valles.

A última hora del día, oscurenciéndose ya el ambiente, llegamos a la estación de destino, algo agotados pero con la convicción de que todavía quedaba por delante la búsqueda del hotel:


Y sí señores y señoras, por fin el RollerCoaster Team plantaba la bandera en la forzadamente modernizada Beijing, ex-sede olímpica y de abruptos contrastes:


Por sorprendente que parezca, la llegada a nuestro hotel fue realmente rápida, en menos de media hora estábamos ya dejando nuestras maletas en las habitaciones de un extraño hotel que más parecía una especie de apartamento veraniego. Moqueta desgastada, dos lavabos (uno de ellos con una inquietante sauna precintada) habitaciones de techos altísimos, camas duras cual mármol y una televisión de 40 pulgadas pero de tubo (imaginad el armatoste). Lo bueno es que en este hotel tan solo debíamos pasar esta primera noche:



Tras acostumbrarnos a semejante rareza, decidimos dar comienzo a una de las esencias básicas del RCT: la exploración del entorno.

Para ello paseamos a través de las calles colindantes al hotel, donde encontramos elementos tan raros como un prostíbulo exclusivo para chinos (preguntamos curiosos qué era aquello a la señorita que había en la entrada, la respuesta fue clara y concisa: "not for you, out" y cuando vimos que un guarda de seguridad nos señalaba con el brazo que saliéramos, no quisimos insistir).

Finalmente localizamos una calle a oscuras con diminutos restaurantes de condiciones bastante insalubres y con una fauna local bastante chocante, requisitos indispensables para que nos quedáramos allí a cenar. Lo demás fue disfrutar de una exquisita cena por el irrisorio precio de apenas 4 euros al cambio. Un botellín de cerveza china de 75 cl. por 20 céntimos de euro. ¡Buen provecho!:


No tengo muy claro qué es lo que comimos (más que nada porque eran fotografías diminutas y el resto estaba todo escrito en chino) pero creo que comí una especie de algas con carne y unos tallarines con verduras muy ricos. Nada de perros ni ratas, vayan desfilando las leyendas urbanas...

El objetivo para el siguiente día, el más primordial, era descansar. 

*****
Y hasta este punto llega este tercer y final episodio del análisis a China Dinosaur Park, uno de los parques temáticos más sorprendentes de todo el viaje y sin duda alguna toda una experiencia enriquecedora para el grupo y para mi, a nivel personal.

Clausuramos de esta manera el itinerario del viaje perteneciente al área de Shanghai y Suzhou, adentrándonos de ahora en adelante en los dudosos encantos de una ciudad terriblemente organizada como es la vieja Pekín (o Beijing).

¿Qué nos deparará a partir de aquí el RCT Tour de 2013? Pronto lo descubriréis aquí, en Bloggercoaster. Por el momento, ¿qué os ha parecido China Dinosaur Park? ¿Os convence?

3 comentarios:

  1. AFAPAM: A mi me convence. Me parece un parque muy bien tematizado. Lo del flume indoor me parece super original. Lastima que esas ultimas atracciones estuvieran cerradas.

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  2. Aun sin contar con ninguna novedad de vanguardia, sí es un parque bastante completo. Las rides clásicas presentadas con esta cantidad y calidad de theming se ven bastante resultonas.

    A veces nos centramos solo en los parques y no nos paramos a pensar en el resto del viaje. Transporte, alojamiento, ciudades desconocidas... hay muchas variables que enriquecen el viaje y más en países tan lejanos y exóticos como este. Tiene que ser una experiencia inexplicable aventurarte en algo así con tus amigos. Qué envidia me das!!!

    ¿Después de esto qué será lo próximo? Japón tal vez... ;)

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    1. La próxima bandera "exótica" es Finlandia, Japón todavía queda lejos en el planning, pero no tan lejos como años atrás.

      Ciertamente el viaje del RCT de 2013 lleva una cantidad de anécdotas y momentos muy grande, de hecho llevo en mente publicar un par de entradas con material fotográfico variado de cosas extrañas, curiosas o divertidas que nos encontramos por China, sin estar relacionadas directamente con parques (gastronomía, turismo, transporte, gentes, hoteles...). Ciertamente si quieres ofrecerle a la memoria una bandeja de elementos totalmente nuevos, China es un buen país para hacerlo jeje.

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