sábado, 21 de junio de 2014

Bitácoras desde Inglaterra (parte 2)

Morning!

Amanece en la campiña inglesa, las primeras luces bañan los valles de York y los integrantes del RCT, ahora sí al completo, nos disponemos a empezar el primer día oficial de viaje al 100%, plantando bandera en un parque de atracciones totalmente nuevo para el grupo: Flamingo Land.

La decisión fue unánime: una vez llegados al parque lo primero que haríamos (y esperando a la operativa de todas las coasters y rides, que suelen abrir posteriormente a la apertura de puertas del parque) nos dispondríamos a tomar el primer desayuno y a tomar las fuerzas necesarias. Dicho y hecho, a eso de las 9:30 AM pisábamos el parking del parque, dispuestos a abordar semejante hazaña y sorprendidos por el interesante skyline que presenta nada más llegar Flamingo Land:

Con previsión, la mayoría de integrantes del RCT habíamos adquirido previamente la entrada del parque por dos razones muy básicas: 1) ahorrar hasta un 17% en el precio final del ticket comprando on-line (una constante en casi todos los parques ingleses) y 2) ahorrar las posibles colas de acceso a las taquillas del parque (unos minutos extra nunca vienen mal):
Como os he indicado, nada más entrar buscamos la primera cafetería dispuesta a servirnos un nutritivo y completísimo desayuno inglés. En este caso la elegida fue la Metropolis Bar&Grill, situada nada más entrar al recinto a mano izquierda. Precios algo inflados respecto al resultado final, pero un desayuno completo bien merece pagar un par de libras más de lo normal. Allí fue donde, además, nos sacamos la primera foto completa de grupo:
Tras este primer banquete estomacal, era momento de afilar las garras de entusiastas y despedazar, sin piedad, el parque y sus credits por completo. Decidimos seguir el consejo que la propia guía del parque advierte (Velocity, la moto-coaster de Vekoma, adquiere un nivel de attendance por la mañana demasiado exagerado debido a ser la primera que los visitantes encuentran en el camino) y pasamos a catar a destajo Hero, la nueva volare de Flamingo Land que yo ya llevaba probada del Prater de Viena y que resultó ser más suave y agradable que su versión vienesa:
Aunque sin duda alguna el protagonista indiscutible del resto del día en los comentarios y valoraciones fue la flamante Mumbo Jumbo, el siguiente credit que decidimos tachar de nuestra lista personal y, sinceramente, todo un hallazgo que bien podría convertirse en una de las grandes sorpresas del viaje:
Suave, precisa, cómoda y terriblemente divertida. El Loco de S&S resultó ser un exquisito aperitivo de fuerzas G e inversiones digno del más exquisito sibarita de parques. Y eso que un servidor no las tenía todas antes de riddearlo, resultó ser toda una sorpresa. Más adelante ya os lo analizaré en el blog ya que sí, merece una posición en la sala de honor de los Bloggercoaster Classics.

La siguiente en entrar a la particular sala de exámenes del RCT fue Kumali, todo un clásico de las coasters europeas y durante muchos años estandarte del parque británico:
De nuevo me llevé sorpresa ya que he de confesar que siempre la menosprecié pensando que era una SLC más (quizás con algún elemento cambiado para darle el toque customizado) pero resultó que ya en Happy Valley Beijing la había probado, exactamente el mismo modelo, medidas e inversiones, bajo el nombre de Golden Wings in Snowfield:
¿La verdad? Insípida, vibrante (no se si muy para bien) y demasiado marcada por el orden previsible de sus elementos (loop, cobra roll, zero-g y una hélice panorámica gigantesca). Decepción que ya pude intuir a partir de acceder a las colas y que confirmé al salir de la misma.

A partir de este primer atracón de "grandes credits" empezamos la cata a destajo de las rides (principalmente flats) del parque, momento en el cual pudimos observar que Flamingo Land se defiende de una manera más que digna a nivel europeo y ofrece un catálogo interesante para los amantes de las fuerzas extremas y el mareo gratuito.

El primer fichaje en el pasaporte RCT fue el big splash de Lost River Ride, un despropósito de medidas casi cómicas basado en un ciclo casi eterno de un cuarto de hora largo que resume su climax en lo que véis en la siguiente fotografía, su primer y único big drop. El resto es un paseo larguísimo sin velocidad y observando algunas bestias salvajes en la lejanía:
Aunque el orden de visita no fue exactamente este, hay que destacar que pasado el mediodía y ya con toda la marabunta de clientela absorvida, decidimos comer en uno de los restaurantes temáticos del parque. En esta ocasión el elegido fue Jungle Joe's Food Court, una especie de micro-clima cubierto de rocas tematizadas, palmeras sintéticas y un aire más bien oscuro. Allí me sorprendieron con lo que podeis observar en la siguiente fotografía a la derecha, una hamburguesa de patatas fritas, así tal cual:
Repuestas las energías y los ánimos, nos dispusimos a completar la práctica totalidad del catálogo de credits que el parque nos ofrecía, incluídas las kiddies como esta entrañable Dino Roller (llamada, he de decir, a ser borrada del mapa más pronto que tarde):
Y también decidimos atrevernos con las flats, que hasta el viaje de este año no habían sido nunca una prioridad, pero que durante esta edición quisimos completar sin excepción alguna. Así fue como riddeamos Flip Flop, un desafiante pendulum de Fabbri que demostró tener unos ridículos ciclos de 10 minutos (echad cuenta de los balanceos que ello implica) y que nos dejó ligeramente tocados a casi todos los integrantes del grupo, una auténtica máquina de marear gratuitamente:
Otro de los inventos que decidimos probar sí o sí (principalmente porque se trataba cómo no de un credit más) fue Twistosaurus, la novedad de 2013 del parque y he de decir que una de esas bizarras coasters que le hacen a uno cuestionarse hasta dónde se puede llegar a invertir por un layout de dimensiones francamente ridículas. Una spinning de Zamperla muy descafeinada y que se nota que pretende romper con la clásica estética de los twister de turno. Mediocremente interesante, como corroboran las divertidas caras de parte de los integrantes del grupo:
Y para poner la guinda al pastel de la jornada (más allá de riddear cosas como Cliff Hanger, Navigator o Sky Flyer) decidimos a última hora del día hacer una visita a la que aparentemente debía ser la "gran" major del parque y que resultó convertirse en una enorme bola de humo, os hablo de Velocity, la segunda moto-coaster construida por Vekoma en un ya lejano 2005:
Tremendamente cabezona, con un paso a través de transiciones innecesariamente molesto y una serie de peraltes y elementos realmente aburridos (a excepción del consabido baile de airtimes en el último centenar de metros). Un layout desproporcionado para un credit que roza, sin pena ni gloria, la categoría de familiar.

Completada nuestra visita al parque, teníamos programado un evento en un pub típicamente inglés en la norteña ciudad de Leeds, donde nos decidimos a probar una selecta variedad de cervezas típicamente inglesas a la vez de socializar con nativos del lugar, risas y anécdotas mediante.

A última hora de la noche, tras una cena en un McDonald's cercano a una feria que había montada en la misma ciudad (y en la cual no pudimos localizar credit alguno) iniciamos la retirada en dirección al mismo hotel de York, donde debíamos pasar la segunda noche de hospedaje y preparar a la mañana siguiente un robusto plan que comprendería la conquista de un segundo parque (nuevo para alguno de los integrantes del grupo): Lightwater Valley, hogar de la incombustible y desafiante The Ultimate.

Pero eso será algo que os explicaré en la próxima bitácora...

See you!

3 comentarios:

  1. como mola mumbo jumbo, parece cómoda y suave y aunque pequeñita llena de elementos interesantes. mola.

    por cierto ¿tiene algo que ver con la empresa de videjuegos del mismo nombre? el logo es igual, salvo que la de juegos es en blanco y negro:

    http://www.gamingangels.com/wp-content/uploads/2010/01/Mumbo-Jumbo.JPG

    VS

    https://d8kyhhndkm363.cloudfront.net/8/176014/mumbo_jumbo_flamingo-land1.jpg

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  2. Muy completa y divertida de leer tu bitácora. Ya sabes que yo soy "newie" en esto y por eso me pareció muy chulas todas las major que probamos, incluida la moto-coaster a la que me hubiese gustado ridear por segunda vez. Totalmente de acuerdo con el despropósito de LOST RIVER donde como sabes hay una detención de la góndola gratuita de unos 2-4 minutos que la eternizan. Esperaremos con pasíon tu siguiente Bitácora.

    Jaumet

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  3. Interesante review, claro! Estamos en el típico momento en el que ya empiezan a aparecer los primeros brotes de nostalgia. Gran bitácora. Esperando la próxima!

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