miércoles, 14 de mayo de 2014

Holiday Park (parte 2)

Tal y como vimos en la anterior entrada del blog, Holiday Park va mucho más allá de ser el parque que sirve de residencia a la que está considerada como la mejor coaster de acero del mundo (Expedition GeForce) y rompe, desde estos últimos años, para mostrarse como un parque familiar y juvenil a la vez, acaparando más atención por parte de los medios y de los entusiastas a partes iguales.

Ya vimos que muestra una variedad de rides bastante aceptable, comprendiendo prácticamente todos los estilos en su catálogo, desde altura, velocidad, acuáticas o giratorias. Además con la adquisición del parque en estas últimas temporadas por parte del grupo Plopsa favorece la retematización progresiva de todo el parque, lo que le otorga el toque de personalidad del que carecía antes.

Por lo tanto hoy, en Bloggercoaster, continúo el completo análisis de rincones que ya inicié con la primera parte y lo hago justo desde el punto donde nos quedamos, que fue en pleno centro del parque, al salir de la mini-área de Pfälzer Dorf.



Rides de todas las épocas

Lo dicho, nos quedamos recién salidos de Burg Falkenstein y de un entorno preciosista envuelto en casitas típicas de la selva negra alemana, restaurantes con coquetas terrazas y una mezcla de antigüedad y nostalgia ya que Pfälzer Dorf fue, en su día, el acceso y el núcleo a la vez de Holiday Park.

A partir de aquí nos adentramos en una parte mucho más bucólica y bonita del parque, repleta de arboledas y grandes bosques verdes donde empezamos a ver los detalles más antiguos del parque, pero a la vez más recordados, como por ejemplo sus papeleras/cesta:


La que fue la penúltima novedad de Holiday Park antes de ser adquirido por Plopsa luce a día de hoy como un rincón atemporal. Si nos adentramos en sus inmediaciones descubriremos un tipo de theming, una urbanización y un diseño bastante desconsiderado para lo que fue el parque en su día y sobretodo para lo que es en la actualidad. Allí encontramos Holly's Wilde Autofahrt, una wild mouse facturada por Mack Rides y que está claro que nunca fue lo que Holiday Park quería en el parque, sino un parche para evitar la pérdida masiva de clientes que presentaba hace unos 5 o 6 años:


Para quien se pregunte qué es lo que debía ocupar el lugar de esta insulsa wild mouse (que por otra parte no ofrece prácticamente ningún detalle único o destacable más allá de la clonación repetitiva de este tipo de modelo de coaster) deberá darse una vuelta por la entrada que publiqué en su día donde hablé de una novedad sustanciosa que, por lo visto, el parque guardó en el cajón del olvido.

Lo que sí me pareció acertado para la mini-área aunque quizás chocante para el conocedor de parques es esta especie de moto/carro/taxi con máquinas de gancho que se encontraba en las inmediaciones de la coaster. ¿Os recuerda a alguna franquicia en concreto? A mi también:


Dicho esto, hacemos un salto de lado a lado del parque para plantarnos justo en el otro extremo, donde localizamos un área que Plopsa ha intentado arreglar y mejorar durante esta última pausa entre temporada y temporada. Lo primero con lo que nos encontramos es con  Spinning Barrels, que como su propio nombre indica son unos barriles de Huss Rides en los que giraremos durante un buen rato protegidos del entorno con una gigantesca lona picuda (que os reiréis, pero permite riddear esta flat tanto en días de sol extremo como en días de lluvia o nieve, mini-punto para Holiday Park).

A algun@s os sonará de ver esta ride en PortAventura (entre otros parques), pero lo bueno es que en la versión que encontramos en Holiday Park el ciclo no está capado, por lo que los latigazos y fuerzas gravitatorias que experimentamos son puros e incluso diría que algo extremos:


Inmediatamente después se abre ante nosotros la que, hasta hace unos años, se convertía automáticamente en la segunda major más querida de Holiday Park (y que me atrevería a decir que sigue siéndolo años después, ¿porqué no?), me refiero a la antigua Teufels Fässer que en esta temporada 2014 ha sido cambiada a Wickie Splash:


Sentimientos encontrados. Por una parte la antigua ofrecía un theming mucho más desenfadado y joven, ambientada en un aserradero gestionado por el mismísimo demonio y sus secuaces (quien la haya riddeado recordará la musiquilla del cambio de sentido en uno de los tramos del recorrido).

Pero la nueva tematización ofrece un punto de vista más familiar pero a la vez más limpio y cuidado, no solo con lo que hemos visto en actualizaciones y noticias durante estos últimos meses en forma de repintados, sino también con una completa revisión y añadido de efectos, una remodelación de estructuras, una limpieza exhaustiva del canal y una completa colección de theming inspirado en el prolífico Vicky el vikingo:


Creo que ha perdido desenfado y rebeldía, pero ha ganado calidad y familiaridad, que al fin y al cabo viene a ser el estandarte de Plopsa en todos y cada uno de sus parques. Pierde un punto, gana un punto. Eso sí, final double drop sigue siendo tan intenso y divertido como siempre.

Empiezan las alturas

Saltamos del agua vikinga a la enésima plaza donde podemos encontrar diversos elementos (curioso sistema el de pequeñas plazas que utiliza Holiday Park). En esta plaza de gran extensión y completamente circular podremos encontrar un elemento central que llama la atención y que abriría, por así decirlo, el catálogo de rides de altura que ofrece Holiday Park (y que ya vimos un poco presentado con Anubis Free Fall Tower o con Expedition GeForce). Me refiero a la clásica Bounty Tower, una spin ride de altura condenada a la desaparición escalonada de todos los parques habidos y por haber, pero que sigue resistiendo en un parque como este:


Frente a ella encontramos un añadido bastante discreto que hizo el parque en la temporada pasada y del que poco se habló en su día. La desaparición de Gelden Wert Coupon, una mítica spin-ride en la que nosotros controlábamos unos cohetes voladores a través de pistones hidráulicos (y que cuidado, porque generaba unos airtimes bastante generosos) comportó el plantado de esta Balloon Race, una ride que ya tenía el parque instalada en las inmediaciones de Tabalugas Abenteuer (echad un vistazo a la primera parte del análisis) y que tras un repintado y una puesta apunto suple, con bastante acierto cabe decir, la ausencia de los cohetes saltarines:


La plaza que contiene la Bounty Tower sirve también para encarrilar 4 senderos distintos del parque (así que vendría a ser algo así como una rotonda de personas): el sendero que viene de Molly's Wilde Fahrt, el que viene de la "nueva" Wickie Splash, el sendero que bordea el lago final del parque (más adelante os hablaré de él) y el sendero que nos lleva a las inmediaciones de lo que anteriormente fue Superwirbel.

A partir de aquí empieza el nuevo territorio de Sky Scream, una gran zona descubierta (previsiblemente cubierta en un futuro, imagino) donde lo primero que vemos es un clarísimo y merecido homenaje a lo que en su día fue un mito para los coaster-freaks, un símbolo de la ingeniería de coasters en Alemania y algo que vale la pena recordar, hablo del corkscrew de Superwirbel:


Parece que este tipo de elementos gustan a los parques y tras el acertadísimo uso que Alton Towers dio de su antigua Corkscrew usando el mismo elemento en la plaza de entrada al parque, Holiday Park hace lo mismo con su añorada Superwirbel, mostrándonos uno de los elementos más fotografiados en el parque desde su construcción allá por los finales de los años 70.

Tras el arco amarillo de Superwirbel se presenta ante nosotros la nueva monstruosidad de acero del parque, una coaster llamada a convertirse en un hito irremplazable con el paso de los años, la nueva Sky Scream:


Os hablaré más de ella en la siguiente entrada de Bloggercoaster, donde dedicaré una entrada entera a analizarla y mostraros todos los detalles de su ágil y trepidante ciclo, pero lo que puedo decir es que es muy imponente en cuanto a altura y estructuras, que puede dar mucho juego en un parque saturado casi por completo por Expedition GeForce y que, pese a no rivalizar con la diosa naranja en ningún momento, sí que ofrece ciertas maneras de major mítica en caso de que Plopsa juegue correctamente este año la carta del theming y merchandising:


Lo dicho, en la próxima entrada del blog os la explico de arriba a abajo.

Sin apenas darnos cuenta el sendero que recorre la plaza de Sky Scream nos adentra en un paseo a través del bosque y de un camino que rodea por completo uno de los puntos más asolados del parque (pese a que la gente llega a este punto con bastante facilidad). Encontramos de repente, envuelta de árboles y en otra plaza habilitada específicamente para ella (¿lo véis?¡Otra plaza!) la Lighthouse Tower, la tercera "tower" del parque, una star flyer que en su día significó quizás la rotura de hielo de este tipo de rides (fue una de las primeras tematizadas que se vieron) y que ofrece para los más valientes una visión panorámica única desde una altura de ni más ni menos que 80 metros:


Con la proliferación de este tipo de rides en estos últimos años quizás la relevancia de Lighthouse Tower haya perdido fuelle, pero lo cierto es que para mi todavía es un clásico al que es difícil resistirse puesto que ofrece vistas privilegiadas no solo del parque sino también de toda la región, donde podemos encontrar los límites de la conocida como Selva Negra.

Tranquilidad a orillas del lago

Ofrece en este punto del recorrido el parque una oferta mucho más desasosegada, merecedora de la paz y la tranquilidad que quizás no ha abundado en los últimos centenares de metros (después de tantísima ride concentrada) y que a la vez sirve para darse cuenta de la extensión de terreno que ocupa Holiday Park y que, con total probabilidad, se convertirá en novedades en años venideros.

Llegamos a una especie de punto con aroma pesquero, todas las rides y edificios aquí tienen un marcado tono marino o blanco y parece que de repente nos hayamos trasladado del bosque a cualquier costa norteña. Primero nos encontramos con Wellenhopser, una spin-ride de Mack que ya localizamos en tantísimos otros parques y que ofrece un punto de diversión para toda la familia:


Justo delante de ella encontramos el tercer gran restaurante del parque, Sturmschiff Snack, un restaurante de comida rápida servida en bandeja en el cual principalmente podemos elegir entre platos de diversas salchichas con patatas o el mítico fish and chips (atención amantes del manjar británico, no vendría a ser exactamente lo mismo):


En este punto creo que ha sido donde he comido en todas mis visitas a Holiday Park, primero porque es el más económico de todos y segundo porque al estar en el punto más lejano respecto a la entrada significa que cuando llegas aquí ya has gastado unas 2-3 horas de toda la jornada, por lo tanto es justo la hora de comer.

Recomiendo encarecidamente uno de los menús que aquí podemos encontrar, basado en la unión de bratwurst (salchicha típica alemana), ketchup y curry llamado en un arranque de creatividad Currywurst. Este plato acompañado de la bebida de los dioses (más conocido como Mezzo Mix) y os aseguro que vuestro cuerpo adquirirá de repente la fuerza que hayáis perdido por todo el parque. Exquisito es poco:


Si antes o después os entran ganas de aplicar a vuestro cuerpo unas simpáticas dosis de mareo y removido estomacal (si sois inteligentes veréis que después de comer no vendría a ser el momento) podéis echar un ciclo en el barco pirata del parque, que lleva por nombre Sturmschiff:


Y si lo que queréis es hacer la digestión tranquilamente, tenéis en este mismo punto y muy cerca del lago el edificio/graderías de Wasserski-Stuntshow, que en este 2014 apuesta por el tirón de los vampiros y los zombies para regalarnos un entretenido y refrescante show llamado Hollywoods Talking Dead:


Y cuidado porque el show tiene algo que lo hace único (aparte de las acrobacias a bordo de lanchas motoras o de esquís flotantes) y es el hecho de aprovechar muy bien el tirón zombie, dotando a varios de los personajes del show de personalidad zombie pero a la vez humorística, por lo que las risas y el entretenimiento están más que garantizados:


Aunque si en algún momento del espectáculo llegáis a aburriros (cosa altamente improbable, ya os aviso) tendréis de fondo la Lighthouse Tower y ahora la nueva y silenciosa Sky Scream rodeadas ambas de un agradable manto de espeso y verde bosque, unas vistas de las que no cualquier parque de atracciones puede presumir hoy en día:


La pequeña porción del parque que nos quedaría por recorrer sería la del sendero que conecta desde este punto hasta la plaza de la Bounty Tower, el cierre de un gran círculo que carece en absoluto de rides o elementos paisajísiticos, más allá del lago que ya de por sí es un elemento bonito, para qué negarlo. Aquí todo es camino rodeado de espesura, altos arbustos y gigantescas hayas que se elevan hasta la veintena de metros. Un espectáculo para nuestros sentidos totalmente garantizado.

Como os he dicho, finalizamos el recorrido a la altura de Bounty Tower y de Wickie Splash, aquí podéis ver la altura que adquiere su final double drop:


Y llegados a esta localización, habiendo consumido no menos de 3 o 4 horas, habremos completado el parque de atracciones de Holiday Park:


Un parque que como ya he dicho y no me cansaré nunca de decir ofrece mucho más allá que una simple coaster. De hecho la labor que está dedicando a este parque en las últimas temporadas la compañía Plopsa es realmente elogiable pues adquirió un parque que había explotado ya lo suficiente una novedad que ya no era nueva (Expedition GeForce). El antiguo Holiday Park carecía de estrategias de marketing de crecimiento, carecía de merchandising bien desarrollado y parecía carecer, con el añadido de Holly's Wilde Fahrt, de un masterplan que lo encarrilara hacia la vanguardia de los parques.

Con la compra de Plopsa todo eso ha desaparecido y estamos viendo como el parque no sólo renace de sus prematuras cenizas, sino que emerge mucho más colorista y vivo que nunca, obligando a las familias con vivienda cercana a la región a elegir entre pasar un par de días en Europa Park (y toda la economía que ello conlleva) o hacer una rápida visita a Holiday Park y ahorrarse los elevados precios.

Holiday Park no es una pieza más del puzzle alemán, sino que comienza a perfilarse como un futuro parque básico.

*****

Hasta aquí la segunda parte del análisis a Holiday Park, donde hemos podido ver que el parque que se encargó de ofrecer al mundo entero en su día una joya de la ingeniería coasteril también lucha a día de hoy por convertirse en un referente del ocio familiar y juvenil.

Con añadidos como Sky Scream o la tematización sistemática de todas sus zonas en las marcas de las cuales Studio100 es propietaria, Holiday Park promete ofrecer en las temporadas venideras sustanciales novedades (me imagino que a un ritmo pausado pero constante). Es la nueva niña mimada de Plopsa (con permiso de Plopsa de Panne).

Y recordad, la siguiente entrada del blog será un análisis detallado para dar la bienvenida a la galería de Bloggercoaster Classics de una coaster de muy reciente construcción e inauguración: Sky Scream.

3 comentarios:

  1. No termino de acostumbrarme a ver engendros como una wild mouse de feria en ciertos parques rompiendo la armonía estética. Son como manchas difíciles de quitar.

    Lo del corkscrew de superwirbel a modo de arco me encanta, lo veo acertadísimo y casi una muestra de respeto rindiendo culto al pasado.

    Aparte de la calidad del stuntshow, el tema está trilladísimo. Debo de ser la única persona del mundo que no está obsesionada con zombies y vampiros.

    Otro aspecto elogiable es el hecho de conservar zonas verdes naturales por las que pasear simplemente viendo árboles y sentir la paz. No hay por qué llenar hasta el último rincón.


    Nunca había oído eso de "capar un ciclo", ¿podrías explicar un poco en qué consiste?

    Gracias y un abrazo ;)

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    1. Cuando una empresa te vende X atracción (generalmente en flats) te la vende configurada y montada para poder realizar un ciclo concreto con unas características específicas (vueltas, tiempo, intensidad, restricciones de seguridad, etc). Tu, como propietario, puedes en cualquier momento modificar esas características siempre que se ajusten a las inspecciones de seguridad (como las de la famosa TÜV) para adaptarlas al público potencial de tu parque. Si visitan más tu parque familias que jóvenes, adaptarás tus atracciones a ciclos más apacibles y tranquilos para facilitar que se puedan montar en ellas niños y padres, por ejemplo.

      En el caso de PortAventura, la llegada de Universal's a la gestión del parque supuso un "capado" general de todas las flats del parque. Por eso desde entonces Kon Tiki no se balancea tan alto como al abrir el parque, Yucatán adquiere menos velocidad en los giros y Crazy Barrels (en este caso) genera infinitamente menos fuerzas G que los Spinning Barrels de Holiday Park, un parque que no ha visto la necesidad nunca de "capar" estas características de giro y velocidad.

      Es por eso que muchas flats vale la pena probarlas en distintos parques, porque pesen a ser las mismas en apariencia, luego los ciclos suelen variar muchísimo.

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    2. Todo clarísimo. Muchas gracias ;)

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