domingo, 13 de noviembre de 2011

Reus no-air

Haciendo este malísimo juego de palabras (Reus no-air = Ryanair) vengo a anunciaros el tema del que hoy vamos a hablar en el blog y que no, no será una entrada de queja hacia los servicios de Ryanair, sino que viene a indicar el cierre total del servicio por parte de la compañía irlandesa en la ciudad puente entre muchas ciudades europeas y la Costa Daurada.

Hoy, y siempre mediante las notas de prensa que la misma compañía facilita públicamente, vamos a hacer un simple análisis de la trayectoria de los 4 aeropuertos con los que empezó a operar la empresa a principios de año y a ver cuál será el futuro que deparará la crisis a la que presume de ser la compañía más low-cost de todas.

Repito que no va a ser una entrada para dejar ir todas las quejas respecto a esta u otras compañías y quiero evitar el debate sobre ello, sobre esta calidad ya hay centenares de blogs y páginas que se dedican a hablar a diario, yo pretendo enfocar la entrada de hoy desde un punto de vista más analítico.

Un presente desolador

Desconozco cómo estará el panorama a nivel nacional, pero me consta que también ha tenido la empresa irlandesa sus rifirafes a lo largo del año con aeropuertos como los de Alicante, Santiago de Compostela o los que inicialmente apostaron por la aerolínea de bajo coste, pero que posteriormente tuvieron que prescindir de sus servicios.

En Cataluña hay 4 aeropuertos en la actualidad que ofrecen servicios comerciales y son, por orden de relevancia: Barcelona Prat, Girona, Reus y Lleida.

Ryanair disponía a principios de 2011 de una amplia flota repartida por los 4 aeropuertos catalanes.

En octubre del 2010, aquí mismo en Bloggercoaster, anuncié y comenté extensamente el catálogo de destinos que nos ofrecía Ryanair a los viajeros que solemos frecuentar el aeropuerto de la capital catalana, un catálogo que parece ser ha sido ampliado y reforzado debido al relativo éxito que ha cosechado, pese a la crisis económica que azota el país.

Justo lo contrario ha ocurrido en Lleida, un aeropuerto con muchísimas pretensiones en su inauguración pero que ha visto como, drásticamente, se reducía su previsión y volumen de viajeros hasta llegar a la ridícula cifra de menos de 10 vuelos semanales, todos ellos operados mediante la filial low-cost de Iberia. Ryanair anunció el 24 de marzo de este mismo año el cese definitivo de su actividad en el flamante pero poco efectivo aeropuerto de Lleida.

El aeropuerto de Reus dejará de funcionar a modo comercial, lo hará como un aeródromo menor.

Tampoco ha corrido mejor suerte Girona, que ha visto como la compañía rebajaba a la mitad el número de rutas para este mismo invierno (de 46 a 25 a partir del pasado octubre) y aplicaba tijeretazo a otros 6 itinerarios en su frecuencia de rutas. 1,3 millones de € en pérdidas y la nada despreciable cifra de mil empleos (directos e indirectos) ha sido la consecuencia de esta política de austeridad de Ryanair en Girona.

Ha sido Reus, también en octubre, quien más ha acabado pagando los platos rotos. La compañía anunciaba ya a finales de junio que si la inversión de la Generalitat en sus servicios se veía reducía, como así lo marcaba el plan de austeridad del nuevo gobierno, que el aeropuerto de Reus acabaría perdiendo sus rutas por completo a partir de octubre. Y dicho y hecho, el pasado 30 de octubre a las 19:50 despegaba de la capital del Baix Camp el último avión fletado por Ryanair, cerrando por completo el catálogo de rutas disponibles hasta, como mínimo, abril del 2012.

CIU cierra el grifo totalmente

La crecida de CIU en las urnas tanto en las elecciones municipales como en las autonómicas, con el consiguiente relevo político de PSC a CIU, ha hecho que las conocidas y anunciadas políticas de austeridad de CIU hayan influido enormemente en este cierre progresivo de vuelos y servicios por parte de la compañía irlandesa.

El trato que proponía Ryanair para seguir operando, tanto en Reus como en Girona, era el pago, por parte del gobierno, de una alta subvención que regulara el coste añadido de los servicios low-cost y que permitiera, por así decirlo, seguir facilitando vuelos baratos a los consumidores catalanes.

Despegar o aterrizar desde Girona o Reus será muy difícil en estos meses de invierno.

Dicho de otra manera y descubriendo totalmente la política de funcionamiento de Ryanair, el gobierno tenía que pagar un tanto por ciento del vuelo de cada usuario para que así, la aerolínea, lo pudiera descontar del precio final de cada pasajero. Esto luego, a efectos prácticos, puede que se aplique o que no, pero Ryanair en todo eso ya se había ganado un dinero limpio a costa del gobierno del PSC, y a costa de las arcas nacionales.

Lógicamente CIU vio en esta práctica, llevada a cabo durante los últimos 3 años por el PSC, una pérdida razonable de fondos y un motivo más que claro para cortar, tajantemente, esta subvención que hacía ganar dinero a Ryanair a costa de ofrecer un servicio que otras compañías ya ofrecen en la actualidad (aunque cabe reconocerlo, a un nivel sensiblemente inferior).


La respuesta por parte de los irlandeses no se ha hecho esperar y ahí donde a principios de año prometía numerosas ampliaciones de flota y de destinos se ha convertido, en apenas 10 meses, en un cierre progresivo y destructivo de servicios que han acabado por ahogar Reus, noquear Girona y veremos qué ocurre finalmente con Barcelona que, parece ser, es la única que sobrevive al arrebato de la low cost.

Consecuencias inmediatas en los viajeros

A priori las consecuencias quedan claras: la cantidad de destinos "exóticos" y de vuelos a aeropuertos secundarios o terciarios en toda Europa se ha visto reducida muchísimo, por lo que la visita a muchos parques cercanos a esos destinos queda totalmente descartada.


Si queremos viajar desde ahora hasta abril con Ryanair a un aeropuerto secundario tendremos o bien que viajar desde Barcelona (donde pese a la diversidad de rutas todavía existe cierto vacío en el rango de oportunidades de destinos) o desde Girona, aunque Girona ofrece un abanico de posibilidades muy acotadas, con la única posibilidad de viajar cómodamente a Inglaterra o Italia, ya que el resto de destinos (incluidos los aeropuertos españoles) han sido totalmente suprimidos o reducidos a un único aeropuerto de destino.


Esto también afecta en el precio final de los billetes que, aunque se nos niegue por activa y por pasiva, sufrirán probablemente en el transcurso de los siguientes meses, una pequeña subida para compensar el cierre de rutas. Si hace un año Cataluña operaba un total de, pongamos, 100 rutas, ahora operará con menos del 50%, por lo que los beneficios serán menores y se tendrá que compensar de alguna manera. Ello repercutirá probablemente en el precio final y el incremento de tasas suplementarias al bolsillo del pasajero.

Un futuro ¿esperanzador?

Ryanair ha dejado claro, eso sí, que sigue teniendo las puertas abiertas a cualquier tipo de negociación o acuerdo que haga que los aeropuertos catalanes (en especial Reus y Girona) vuelvan a recuperar sus posiciones una vez la política de austeridad de la Generalitat haya sido aplicada. Hace apenas unos días la empresa de vuelos anunciaba en su web la apertura de algunos de sus destinos más demandados para la primavera de 2012 en Reus y, queda claro, el servicio en el aeropuerto para la temporada veraniega del año que viene está asegurado pues es un negocio totalmente rentable tanto para el gobierno como para la compañía.

No queda tan clara esta postura en Girona, que parece que seguirá recibiendo el latigazo castigador de los irlandeses mientras no se apliquen subvenciones que permitan que se añadan rutas al pobre panorama que actualmente tiene. No parece, desde luego, que la Generalitat tenga ganas de invertir en ello, por lo que no hay que ser demasiado visionario para darse cuenta de que Girona está condenada a pagar un precio muy alto por la supervivencia de su aeropuerto en invierno y, posiblemente, en verano también.


Por último queda fijarnos en Barcelona que, como ya he comentado, funciona de momento con total normalidad y arroja unos datos bastante positivos para la compañía, aunque también hay que tener en cuenta que parte de las altas subvenciones y gastos que Ryanair exige al gobierno en la Ciudad Condal vienen sufragados por los fondos del ayuntamiento de la propia ciudad, lo cual hace pensar que es este el motivo de su actual estado y el hecho por el que todavía queden bastantes rutas disponibles en Barcelona.

*****

Ciertamente, es una pena que hoy en día el tira y afloja que llevan la aerolínea Ryanair y la Generalitat en cuanto a los gastos y subvenciones hagan que un negocio aparentemente redondo también se vea afectado, de manera negativa, por la dichosa crisis.

También sirven este tipo de noticias y análisis para darse cuenta de que, pese a las cifras positivas arrojadas por multitud de medios a finales de cada año, en realidad el low cost no viene generado por la cuantía de vuelos, sino por las subvenciones y pagos del gobierno para hacer que la compañía ofrezca unos precios tan reventados. Y cómo no, finalmente los afectados por todo este montaje, somos los viajeros que lo único que queremos es disfrutar de un viaje al precio que se nos ofrezca y con unos derechos mínimos.

Afortunadamente no sólo de Ryanair vivimos los viajeros y cada día más abundan la cantidad de ofertas ofrecidas por otras compañías que, previo pago de subvenciones o no, nos brindan la oportunidad de visitar aeropuertos y posteriormente ciudades, regiones y parques esparcidos por todo el viejo continente.

¿Será quizás 2012 el año en el que perderá el trono de las low-cost?¿Cuál creéis que podría ser la compañía que le relevase?

3 comentarios:

  1. Como ya sabes, nosotros, desde que vivímos en Lille solo podemos viajar con Ryanair ya que no hay otras compañías aereas que hagan la ruta hasta Barcelona.
    Por culpa de la subida de precios que ya se nota y el corte de linias, no viajaremos tanto a casa este invierno.

    Por mi que se pudra esta compañía, que el propietario es un aprovechado de mierda!

    Por suerte a partir de Marzo ya tendremos linia Lille-Barcelona. ^^

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  2. Se te olvida mencionar el empeño de Ryanair en incumplir normativas de Aena por tal de ahorrarse dinero. En principio no se permite el tránsito de pasajeros a pie de pista, motivo por el cual todas las compañías han de pagar por utilizar los fingers o los buses jardinera. En Girona, al igual que en Alicante, se les ha acabado el plazo que tenían abandonar esta práctica y funcionar igual que el resto de compañías. Después de que el Gobierno y el Govern se hartaran de dar moratorias y les prohibieran funcionar como hasta ahora, Ryanair cumplió su amenaza y recortó rutas para compensar "los gastos".

    De cualquier manera siempre me ha parecido indignante que esta empresa sobreviva a base de coacción a los gobiernos regionales de dónde opera nutriéndose de subvenciones para evadir impuestos y maximizar beneficios. EasyJet y otras lowcost sin precios tan "ganga" pero igualmente asequibles trabajan de manera más transparente y consiguen beneficios. Ojalá a los de Ryanair se les rompa pronto la saca de tanto apretarla...

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  3. Como he comentado Kwak, la práctica de actividades legales o ilegales para o por el cliente por parte de Ryanair (de sobras por todos y todas conocidas) no es el tema de debate, aunque sí, cada vez prolifera más información sobre el tema y es preocupante sin duda. Sobre la coacción al gobierno de cada región, es el pan de cada día. Me gustaría ver qué estarán pagando otros países como Alemania o Inglaterra por tener a esta empresa... porque tienen una cantidad de destinos bastante alta.

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