martes, 13 de noviembre de 2012

La flying coaster de Tripsdrill

No es la primera vez que os hablo de proyectos que finalmente no vieron la luz en los respectivos parques donde fueron presentados. En muchas ocasiones el proceso de idea, diseño y conceptualización quedan en meros bocetos o artworks ya que, por causas diversas, los parques optan finalmente por medidas más prácticas, económicas o viables.

En el caso de hoy hablaremos del proyecto que estuvo sobre la mesa justo antes de que Erlebnispark Tripsdrill (más conocido como Tripsdrill a secas) se decidiera finalmente por una woodie con el sistema Cordes que más tarde, en 2008, pasó a ser la woodie familiar Mammut.

Hoy, en Bloggercoaster, y gracias al trabajo publicado por Alex Korting, un referente en el diseño de rides y zonas temáticas para parques del centro y norte de Europa, veremos la flying coaster que jamás llegó a tener Tripsdrill, pero que estuvo presentada y planteada sobre el papel.


La elección de la madera

Tripsdrill se había situado en el mapa de la calidad hecha coaster con su excelso trabajo en G'sengte Sau en 1998, una coaster que todavía hoy día merece estar bien presente en la estantería de calidad de cualquier entusiasta que se precie (de hecho ya le dediqué toda una entrada hará cosa de dos años).

Pese a ser un parque muy familiar y con un enfoque principalmente rural y artesano, Tripsdrill ha ido añadiendo credits a su recinto con una regularidad más o menos periódica (dentro, claro está, de las posibilidades del propio parque económicamente hablando), por lo que a principios del año 2007 y en vistas de que el parque necesitaba ya un nuevo añadido espectacular que lo volviera a poner a ojos de los europeos, empezó a planear la construcción de una gran coaster, superior en cuanto a prestaciones tecnológicas a las dos que ya poseía: la citada G'sengte Sau y la familiar Rasender Tausendfüßler.

Alex Korting es un reputado diseñador e ilustrador que ha trabajado ya para un montón de parques de pequeño o mediano tamaño, pese a que recientemente ha colaborado en parques de calibre mayor, sin ir más lejos su obra ha podido ser vista en los artworks de Wodan, la novísima coaster de Europa Park.

Por entonces el parque contactó con él (aunque ya habían estado trabajando en 2005 en otro proyecto de woodie) y decidieron que 2008 iba a ser definitivamente el año en que Tripsdrill estrenaría un nuevo concepto. Alex se inspiró para ello en un modelo que por aquél entonces Vekoma había presentado ya en sociedad bajo el nombre de flying dutchman y con el que trabajaba en desarrollo de una versión mejorada (que más tarde vimos construida como Stingray).

Korting decidió inspirarse en un diseño de proyecto para Tripsdrill basado en el mundo de la madera y la vida de montaña, algo que siempre ha caracterizado al parque alemán, además de trabajar con un concepto que hasta hoy día no ha vuelto a ser explotado: mezclar una flying coaster con una sección launched.

 
Mammut, el diseño con el que finalmente Tripsdrill decidió jugar su baza para 2008.

A día de hoy sabemos que finalmente Tripdrill decidió decantarse más por un proyecto de woodie familiar de Gerstlauer con el uso del sistema de construcción patentado por Cordes, probablemente una coaster mucho más económica y que ha dado unos resultados excelentes. Pero a continuación vamos a ver qué tenía Alex Korting en mente, qué quería presentarnos.

Colgados, lanzados, aterrados,...

Paso a transcribir, traducido del original que el propio Korting se encargó de redactar, el boceto principal de lo que debía ser esta flying coaster apodada inicialmente "Sawmill Flying Coaster", acompañando el escrito con los bocetos que el propio Alex Korting muestra en su web portafolio:

"El viaje de la Flying Coaster comienza en la estación, donde los clientes toman sus asientos sentándose en ellos y son atados mediante los arneses de seguridad. En contraste a otros sistemas de este tipo, los asientos en esta ocasión no giran hacia atrás. Los pasajeros salen de la estación con los asientos en posición vertical (sentados) pero en dirección hacia atrás (no hacia adelante). El tren pasa por una pequeña colina y tras una curva encuentra una rueda hidráulica que impulsa un aserradero de madera. En este punto hay pequeñas salpicaduras de agua hacia los pasajeros.



Inmediatamente después de esto, el tren entra en una curva cerrada y pasa a una recta hasta estar recto por completo (aquí es donde se acopla a la configuración técnica para la recta de lanzamiento). Toda esta parte transcurre a través de una narración al estilo dark ride. 

 

El tren se detiene en un momento dramático para el pasajero ya que de repente descienden unas grandes sierras circulares desde el techo y amenazan con cortar a los pasajeros. Sin embargo, ahora los asientos giran para situar a los pasajeros en posición horizontal (sobre su espalda) y las cuchillas no llegan a tocarles.



Tras unos segundos de calma las luces se apagan y en esta posición el tren es lanzado por la recta a gran velocidad atravesando una zona de falso túnel y posiblemente varios efectos. Esta pista de lanzamiento conduce a medio rizo (también llamado 180º roll o Lie to Fly) situado en el interior del edificio más alto de la coaster. 

 

Una vez girado el tren y ya en posición horizontal voladora el tren roza la parte más cercana al suelo a gran velocidad y sobrevuela todo el terreno. De la misma manera que el resto de coasters invertidas o voladoras de Vekoma hay que aprovechar los puntos de cercanía con el suelo para impresionar a los visitantes externos haciendo especial uso de las grandes curvas peraltadas para, por ejemplo, pasar un tramo de vía por encima de la entrada o a través de largos túneles."

 

Como podemos ver, la idea básica era transportar al viajero a través de un aserradero de madera y hacerle experimentar cierta confusión (quizás horror) con el visionado de unas sierras circulares acercándose y a punto de cortarlo en pedazos justo antes de catapultarlo hacia las alturas volando cual ave silvestre.

Vemos que la idea de sierras circulares, madera y bosque siguieron estando presentes en el concepto que más tarde Trispdrill se encargó de presentar (Mammut), aunque a un nivel quizás un poco más familiar y no tan intenso.

 
El modelo de flying coaster de Vekoma usado para Stingray, en el que se inspiró Alex Korting

Ciertamente, como novedad hubiera sido un completo éxito ya que, por lo visto, el modelo Stingray es bastante efectivo en cuanto a suavidad y layout. Esto sumado a un estudiado recorrido tematizado y una temática tan variada y original como es la que sabe explotar Tripsdrill, creo que habrían sido factores decisivos para convertirla en una de las grandes novedades de 2008.

Nos quedamos, eso sí, sin saber exactamente el motivo o motivos por los cuales Tripsdrill optó finalmente por la woodie de Gerstlauer, pese a que como se suele decir, acertó de lleno. Algo que parece que se repetirá en 2013 con el añadido de un nuevo credit (5 años después del último) y que como pudimos saber en las noticias de octubre, de nuevo vendrá facturado por Gerstlauer, una empresa que parece que ha hecho buenas migas con este parque ya que sería el tercer proyecto de ellos en el recinto, además de aportar quizás novedades jugosas como el uso del sistema lapbars en vez de protección por arneses over-the-shoulder, además de un diseño con uso de partes cubiertas o incluso dark ride.

 
¿Se convertirá el proyecto de 2013 en otro éxito rotundo como en su día lo fue Mammut?

¿Acertará de nuevo Tripsdrill esta vez?¿Llegaremos a ver hecho realidad algún día un proyecto similar al que debía ser Sawmill Flying Coaster? El tiempo nos lo dirá, probablemente...

*****

Y hasta aquí esta pequeña pincelada cultural de hoy en el blog. Otro de esos proyectos que tristemente es difícil que veamos hecho realidad en un futuro y que probablemente se habrían ganado la admiración del gran público por muchos años.

Permaneced atentos a Bloggercoaster, porque en la siguiente entrada hablaré de más proyectos que quedaron en el tintero y cuyo concepto corre a cargo de Alex Korting, proyectos muy curiosos, a la vez de originales, que desgraciadamente no veremos por el momento hechos realidad.

3 comentarios:

  1. Lo de las sierras dentadas hubiera sido un tremendo puntazo, sólo con imaginármelo... Ahora toca ver si la Gerstlauer de 2013 viene tan bien tematizada y cuidada como sus dos hermanas ya presentes en el parque.

    ¡Buena entrada, como siempre!

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  2. Esos detalles de theming añadirían un puntazo a la coaster, una pena que no se llevará a cabo.

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  3. Hubiera sido una gran novedad, pero es una lastima que o por viabilidad u operativa, haya proyectos que finalmente se acaben desechando o archivando.
    Imagino, que debido a la actual coyuntura económica, la practica totalidad de parques del mundo (tanto grandes como pequeños), estará archivando o descartando grandes proyectos que podrían haber visto la luz y por ahora tendrán que espera en un cajón a que vengan tiempos mejores.

    Una gran entrada!!

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